Después de reflexionar mucho y discutirlo con mi familia, he tomado la decisión de dejar de fumar.
Esto lo anunció Snoop Dogg en todas sus redes sociales, el mismo rapero que tiene numerosas canciones en las que menciona el consumo de cannabis y que ha sido visto fumando grandes porros en escenarios y en muchos de sus videos. Además, es el creador de una marca llamada Lips by Snoop, cuyos envases llevan frases como «Smoke with everyday» o «Wake and Bake», asociadas y reconocidas a esta figura.
Es innegable que artistas como Snoop Dogg, Wiz Khalifa y muchos otros han influido en la cultura del cannabis a nivel mundial. Sin embargo, a mi parecer, muestran un consumo excesivo que, aunque para ellos parece normal e incluso deseable, no es algo que la mayoría de los consumidores pueda permitirse debido a las posibles consecuencias.
En mi opinión, estar bajo los efectos las 24 horas del día, como Snoop Dogg, no solo no es normal, sino que puede tener impactos negativos en nuestras vidas, trabajo, relaciones, salud física y mental. De hecho, se estima que alrededor del 9% de los usuarios de cannabis desarrollan dependencia, y este porcentaje aumenta al 17% cuando el consumo comienza en la adolescencia.
No puedo afirmar si el anuncio de Snoop Dogg es cierto o parte de una estrategia de marketing, pero ante las múltiples solicitudes de seguidores en Instagram para abordar el tema, consideré que era un buen momento para hablar sobre el consumo responsable, algo que no hemos tocado en el canal en un tiempo.
El DSM-5, un manual de diagnóstico de salud mental, establece que para diagnosticar un trastorno por consumo de sustancias, deben presentarse al menos tres de los siguientes síntomas durante 12 meses. Estos incluyen el desarrollo de tolerancia, experimentar síntomas de abstinencia, uso compulsivo, consumo por periodos más prolongados de lo planeado, deseo infructuoso de disminuir o dejar el consumo, dedicar mucho tiempo a obtener, consumir y recuperarse de los efectos, y disminuir actividades laborales, sociales o recreativas debido al consumo.
Es importante que cada persona analice su situación, ya que el consumo afecta a cada individuo de manera diferente. Considero que hay una diferencia entre el consumo diario y el abuso.
La planta en sí no es mala; de hecho, tiene usos interesantes y una historia fascinante. El problema radica en cómo nos relacionamos con ella. La percepción de riesgo puede ser baja en comparación con otras sustancias, pero eso no significa que no haya potenciales problemas.
Hay ciertas poblaciones con mayor riesgo de abuso y consecuencias negativas asociadas al consumo de drogas. Personas con problemas de salud mental, antecedentes familiares de abuso de sustancias, entornos de violencia y pobreza, y aquellos que comienzan a usar drogas en la adolescencia son más vulnerables al abuso de drogas.
Los trabajos con altos niveles de estrés, largas horas de trabajo y presión laboral intensa también pueden aumentar el riesgo de abuso de sustancias. Profesiones en el ámbito de la salud, medios de comunicación, servicios de emergencia, finanzas y la industria del entretenimiento, donde se tolera o fomenta el consumo de drogas, presentan un mayor riesgo.
Algunas personas recurren a las sustancias para enfrentar padecimientos mentales, dificultades y desafíos de la vida. No busco asustar, sino proporcionar información para que cada uno se conozca mejor y tome decisiones informadas en su vida.
Continuar con el cambio de estilo de vida y dejar el consumo de marihuana puede ser un desafío, pero existen diversas estrategias y tips que pueden ser de gran ayuda. Es importante recordar que cada persona es única y lo que funciona para uno puede no ser igual de efectivo para otro. Aquí van algunas sugerencias para aquellos que buscan cambiar sus hábitos y explorar alternativas como el cannabis medicinal:
1. Establecer metas claras y realistas: Definir metas específicas puede proporcionar una dirección clara para el cambio. Estas metas deben ser realistas y alcanzables, ya que establecer expectativas poco realistas puede llevar a la desmotivación.
2. Busca apoyo: Compartir tus objetivos con amigos, familiares o incluso buscar grupos de apoyo puede ser fundamental. La comprensión y el respaldo de aquellos que te rodean pueden hacer que el proceso de cambio sea más llevadero.
3. Explora el cannabis medicinal: Para algunos, el cannabis medicinal puede ser una herramienta valiosa en el proceso de dejar el consumo recreativo. Consultar con profesionales de la salud y obtener la orientación adecuada sobre cepas y formas de consumo puede marcar la diferencia.
4. Practica actividades alternativas: Busca actividades que te apasionen y que no estén asociadas al consumo de marihuana. Puede ser desde hacer ejercicio, practicar un hobby, leer o aprender algo nuevo. Mantener la mente y el cuerpo ocupados puede ayudar a reducir la dependencia.
5. Considera terapias alternativas: La terapia cognitivo-conductual o terapias alternativas como la meditación y el yoga pueden ayudar a cambiar patrones de pensamiento y comportamiento, proporcionando herramientas para afrontar el estrés y la ansiedad sin recurrir al cannabis.
6. Establece una rutina saludable: Dormir lo suficiente, llevar una dieta equilibrada y hacer ejercicio regularmente son fundamentales para mantener la salud física y mental. Una rutina saludable puede contribuir significativamente al proceso de dejar el consumo de marihuana.
7. Consulta a un profesional de la salud: Si enfrentas dificultades significativas al dejar el consumo de marihuana, buscar la ayuda de un profesional de la salud (como un terapeuta o consejero), puede ser esencial. Ellos pueden proporcionar apoyo personalizado y estrategias específicas.
Recuerda que el proceso de cambio lleva tiempo, y es normal enfrentar desafíos en el camino. La clave está en mantener una mentalidad positiva, ser paciente contigo mismo y buscar el apoyo necesario. Cambiar el estilo de vida puede ser un viaje transformador, y explorar opciones como el cannabis medicinal de manera responsable puede ser parte integral de ese proceso.
