¿La marihuana, es realmente peligrosa o puede aportar beneficios a la salud?, ¿Qué efectos produce la marihuana en nuestro cerebro?
Estas y muchas preguntas más, serán respondidas en esta oportunidad. Así que quédate conmigo hasta el final y acompáñame en este fascinante recorrido, lleno de mucha información de valor.
¿Ya estás listo? ¡Comencémos!
Hoy, voy a utilizar como punto de partida esta polémica decisión del Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil la cual trata sobre una decisión significativa respecto al consumo de marihuana en aquel país.
En junio de 2024, el STF avanzó hacia la despenalización de la posesión de marihuana para uso personal, con una mayoría de jueces votando a favor de dejar de considerar delito el porte, cultivo y consumo de cannabis en cantidades limitadas.
Esta es una planta rodeada de prejuicios y controversias. ¿Es realmente tan dañina como muchos creen, o su uso podría incluso traer beneficios para la salud y el bienestar?
Ahora que ya te has puesto en contexto, quisiera aprovechar esta oportunidad para revelarte los verdaderos efectos de la marihuana en el organismo.
Así es, en esta oportunidad vamos a explorar este tema en profundidad, analizando los compuestos químicos de la marihuana, sus efectos en el cuerpo humano y las implicaciones tanto positivas como negativas de su consumo.
Los compuestos químicos de la marihuana
Al igual que cualquier otra planta, la marihuana contiene cientos de compuestos químicos. Sin embargo, cuando hablamos de sus efectos en el organismo humano, podemos centrarnos principalmente en dos: el tetrahidrocannabinol (THC) y el cannabidiol (CBD). Estos dos compuestos son los responsables de la mayoría de los efectos que la marihuana tiene en el cuerpo y la mente.
Antes de adentrarnos en lo que ocurre dentro del cuerpo de alguien que ha fumado marihuana, es importante entender cómo estas moléculas interactúan con nuestro organismo.
¿Qué ocurre en el cuerpo cuando se fuma marihuana?
Vamos a adentrarnos en lo que sucede dentro del cuerpo de alguien que acaba de fumar marihuana. Con cada calada, el humo cargado de THC desciende por la garganta hasta llegar a los pulmones. Allí, estas sustancias son absorbidas y entran en el torrente sanguíneo, distribuyéndose por todo el cuerpo en cuestión de segundos.
El THC es el principal responsable de los efectos psicoactivos de la marihuana. Cuando llega al cerebro, interfiere con la producción de un mensajero químico llamado adenosina monofosfato cíclico (AMPc), esencial para la comunicación entre neuronas. Sin él, la actividad cerebral se ralentiza, lo que explica efectos como el relajamiento, la sensación de que el tiempo pasa más despacio y un razonamiento más lento.
Sin embargo, el THC también actúa como estimulante en ciertas áreas del cerebro, especialmente en las relacionadas con los cinco sentidos: vista, oído, tacto, gusto y olfato. Esto puede provocar una mayor percepción de los colores, alucinaciones, euforia y el famoso «ataque de hambre» o «larica», que aparece incluso cuando no se tiene hambre.
Por otro lado, el CBD no produce efectos psicoactivos. De hecho, tiende a moderar los efectos del THC, reduciendo su impacto en la percepción y el comportamiento. Además, el CBD tiene propiedades antiinflamatorias y analgésicas, lo que lo convierte en un compuesto prometedor para el tratamiento de diversas afecciones.
Exploremos en detalle algunos de los beneficios más destacados del CBD, respaldados por investigaciones científicas y testimonios de pacientes.

Beneficio número 1. Propiedades antiinflamatorias y analgésicas.
Uno de los usos más reconocidos del CBD es su capacidad para reducir la inflamación y aliviar el dolor. Esto se debe a su interacción con los receptores del sistema endocannabinoide, que regulan funciones como la respuesta inmune y la percepción del dolor. Estudios han demostrado que el CBD puede ser efectivo en el tratamiento de afecciones como la artritis, la fibromialgia y el dolor crónico.
Por ejemplo, en pacientes con artritis reumatoide, el CBD ha mostrado reducir la inflamación de las articulaciones y mejorar la movilidad. Además, su uso tópico en forma de cremas o aceites ha sido efectivo para aliviar dolores musculares y articulares localizados.
Beneficio número 2. Tratamiento de la epilepsia y trastornos neurológicos.
El CBD ha demostrado ser especialmente prometedor en el tratamiento de la epilepsia, particularmente en formas resistentes a los medicamentos tradicionales. Uno de los casos más conocidos es el del síndrome de Dravet, una forma rara y severa de epilepsia infantil. El medicamento Epidiolex, que contiene CBD purificado, ha sido aprobado en varios países para tratar esta condición, reduciendo significativamente la frecuencia e intensidad de las convulsiones.
Además de la epilepsia, el CBD está siendo investigado por su potencial en el tratamiento de otros trastornos neurológicos, como el Parkinson, el Alzheimer y la esclerosis múltiple. Se cree que sus propiedades neuroprotectoras podrían ayudar a ralentizar la progresión de estas enfermedades y mejorar la calidad de vida de los pacientes.
Beneficio número 3. Ansiedad y depresión.
El CBD también ha mostrado ser efectivo en el manejo de trastornos de ansiedad y depresión. A diferencia de los medicamentos tradicionales, como los ansiolíticos y antidepresivos, el CBD no produce efectos secundarios graves, como somnolencia o dependencia. Esto lo convierte en una alternativa natural y segura para muchas personas.
Estudios han demostrado que el CBD puede reducir los síntomas de la ansiedad generalizada, el trastorno de estrés postraumático (TEPT) y el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC). Además, su efecto relajante puede ayudar a mejorar la calidad del sueño, lo que es crucial para quienes sufren de insomnio relacionado con la ansiedad.
Beneficio número 4. Propiedades antioxidantes y neuroprotectoras.
El CBD tiene propiedades antioxidantes que ayudan a combatir el estrés oxidativo, un factor clave en el envejecimiento y el desarrollo de enfermedades crónicas. Estas propiedades también lo convierten en un candidato prometedor para el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas, como el Alzheimer y el Parkinson.
Además, el CBD ha mostrado ser efectivo en la protección de las células nerviosas, lo que podría ser útil en la recuperación de lesiones cerebrales y en la prevención de daños causados por accidentes cerebrovasculares.
Beneficio número 5. Apoyo en el tratamiento del cáncer.
Aunque aún se encuentra en etapas preliminares de investigación, el CBD ha mostrado potencial en el manejo de los síntomas asociados al cáncer y su tratamiento. Por ejemplo, puede ayudar a reducir las náuseas y los vómitos causados por la quimioterapia, así como a estimular el apetito en pacientes que han perdido peso debido a la enfermedad.
Además, algunos estudios sugieren que el CBD podría tener propiedades antitumorales, aunque se necesitan más investigaciones para confirmar estos hallazgos.
Además, cada vez más personas buscan productos naturales a base de marihuana para tratar síntomas como náuseas, fatiga, insomnio y dolores crónicos. Sin embargo, es importante destacar que muchos de estos usos no han sido respaldados por estudios científicos rigurosos. Aunque el CBD y el THC tienen un potencial terapéutico real, su uso debe ser supervisado por profesionales de la salud.
¿Quieres descubrir más sobre el cannabis y sus efectos?
Entonces, suscríbete ahora y dale like a este podcast. Tu apoyo nos motiva a seguir creando contenido de calidad y revelando información que no encontrarás en otro lugar. ¡No te lo pierdas!
A pesar de sus posibles beneficios, el consumo de marihuana no está exento de riesgos.

En primer lugar, fumar cualquier sustancia es perjudicial para la salud. La inhalación de humo caliente daña las células de la boca, la garganta y los pulmones, aumentando el riesgo de enfermedades respiratorias e incluso cáncer.
Además, la marihuana contiene más de 100 sustancias tóxicas, algunas de las cuales también se encuentran en el tabaco, como el formaldehído y el acetaldehído. Estos compuestos pueden dañar los vasos sanguíneos y el corazón, aumentando el riesgo de infartos y derrames cerebrales.
En cuanto a los efectos a largo plazo, el consumo frecuente de marihuana, especialmente durante la adolescencia, puede afectar negativamente el desarrollo cerebral. Estudios han demostrado que el uso regular de marihuana en la juventud está asociado con una disminución de las habilidades cognitivas, como la memoria, la atención y la velocidad de razonamiento.
¿Beneficio o riesgo?
La marihuana es una planta compleja, con efectos tanto positivos como negativos. Si bien sus compuestos, como el CBD y el THC, tienen un potencial terapéutico prometedor, su consumo recreativo conlleva riesgos significativos, especialmente cuando se abusa de ella o se fuma en exceso.
Por eso, la clave está en el equilibrio y la información. Si estás considerando el uso de la marihuana por sus posibles beneficios medicinales, es fundamental consultar a un profesional de la salud y optar por productos regulados y seguros. No se trata sólo de consumir, sino de hacerlo con conciencia y conocimiento.